En servicio Pero el amor es más fuerte Reproducir nota Mientras el temporal de Bahía Blanca no daba tregua a la tragedia que iba en aumento, el equipo de Neonatología del Hospital Penna se ocupó de salvar a los bebés internados con rapidez y compromiso humano. El pasado 7 de marzo un violento temporal azotó la ciudad de Bahía Blanca; durante 8 horas seguidas cayeron 400 milímetros de agua, la mitad de lo que suele llover en la zona a lo largo de seis meses. Calles anegadas, barrios incomunicados viviendas destrozadas y hospitales en emergencia fueron algunos saldos de la tragedia. En pleno desastre, los servicios de salud debieron actuar con rapidez y precisión. Sin dudas, uno de los más afectados fue el Servicio de Neonatología del Hospital Interzonal Dr. José Penna que enfrentó una situación extrema: el agua, por diferentes intersticios ingresó al subsuelo con una rapidez inusitada, allí, donde funciona la unidad neonatal. La respuesta del equipo fue un modelo de toma de decisiones con lucidez clínica y compromiso humano. Eficacia ante la emergencia La tormenta se intensificó durante la madrugada. A las 6:30 de la mañana, el agua barrosa comenzó a entrar en el área de Neonatología. En ese momento se cortó la luz y, aunque se prendió el generador, la energía duró poco. Todos los elementos comenzaron a flotar, así que “lo primero que pensamos fue en evacuar a los 15 bebés que teníamos internados en la Neo”, cuenta Mariana Calahorra, médica neonatóloga con 25 años de experiencia en el hospital. Ante la imposibilidad de usar ascensores y con el agua en aumento, el personal se organizó en dos equipos de acción inmediata. Uno trasladó a los recién nacidos estables a la residencia de madres, ubicada en el primer piso, para que ellas les dieran calor a través de la técnica COPAP (contacto piel a piel). El segundo se encargó de los bebés más vulnerables, que dependían de oxígeno o sueros, y fueron llevados a la sala de pediatría, en el segundo nivel. El traslado se hizo en incubadoras hasta donde fue posible; luego, cada madre, acompañada por una enfermera, subió a su bebé en brazos mientras el agua ya les llegaba a la cintura. “Quiero destacar a las 12 mujeres que asistieron a los pacientes durante las primeras 24 horas. Algunas estaban finalizando su turno, y sin embargo decidieron quedarse con las que ingresaron el día de la lluvia. Ellas son Sonia Scardapane, también médica, y las enfermeras Mercedes Caredu, Romina Moya, Rocío Lagos, Belén Salazar, Maru Coronado, Clara Marcos, Luciana Marrero, Andrea Ávila, Carolina Cari y Ruth Flores. También, una mención especial para el jefe del Servicio, El Dr. Trombeta y el jefe de Sala, el Dr. Mario Iglesias, que, como pudieron llegaron al hospital para acompañarnos una vez desatado el caos” afirma la Dra. Calahorra. Una vez estabilizados, los bebés fueron trasladados fuera del hospital en un operativo escalonado: una camioneta particular, una ambulancia y un camión del Ejército fueron necesarios para sortear los 6 km de calles anegadas y completar el traslado hacia el Hospital Italiano y la Clínica privada Dr. Raúl Matera. “Ningún recién nacido sufrió lesiones ni complicaciones. Ninguno corrió riesgo vital”, subraya Calahorra. La unidad contaba con sistemas de soporte autónomos (tubos de oxígeno y bombas con batería), que fueron claves para mantener la estabilidad clínica durante la emergencia de los bebés, que en algunos casos no superaban el kilo de peso. Continuidad del cuidado neonatal A pesar del colapso de la infraestructura, el equipo de Neonatología nunca interrumpió la atención. Nuevamente se organizaron y dividieron en dos grupos, uno en cada institución receptora, garantizando la continuidad de los cuidados, tanto a recién nacidos internados como a los que seguían naciendo. “El día después todavía no terminó”, explica Mariana, en referencia al impacto persistente de la situación. Desde el 5 de mayo, el Servicio de Neonatología del Hospital Penna volvió a funcionar de manera parcial, recibiendo partos de complejidad tipo II. Los casos más complejos continúan siendo derivados, en tanto se avanza en la reestructuración del área crítica. Este episodio no solo puso a prueba la preparación técnica del equipo, sino también su cohesión. “Actuamos como un bloque”, destaca la Dra. Calahorra. “Cada uno de los que integramos el servicio hubiera respondido de la misma manera. Sabemos que trabajamos con bebés en situaciones de riesgo, y eso define nuestro accionar”. El Servicio de Neonatología del Hospital Penna se fue organizando a lo largo de los años con una estructura interdisciplinaria, con enfermería especializada, médicos neonatólogos, obstetras, psicólogas, trabajadoras sociales y hasta nutricionistas. Durante la emergencia, el liderazgo médico —con presencia del jefe del servicio, Dr. Trombetta, y del jefe de sala, Dr. Mario Iglesias— fue clave para sostener el orden y la calma en un contexto caótico. Una lección para todo el sistema de salud La experiencia del Hospital Penna deja aprendizajes valiosos para otros equipos sanitarios: la necesidad de contar con planes de contingencia adaptables, formación continua, trabajo interdisciplinario y compromiso ético. También pone en evidencia que, ante situaciones extremas, el factor humano puede marcar la diferencia entre una tragedia y un operativo exitoso. En palabras de Mariana Calahorra: “No pensamos en nosotros. Pensamos en esos bebés, que son lo más importante para la vida de una madre o un padre. Y eso nos guió en cada paso”. EQUIPO DEL SERVICIO DE NEONATOLOGÍA Dr. Leandro Ezequiel Trombetta - Jefe del Servicio Dr. Mario Iglesias - Jefe de Sala Dra. Sonia Scardapane - Médica Dra. Mariana Calahorra - Médica Mercedes Caredu - Enfermera Romina Moya - Enfermera Rocío Lagos - Enfermera Belén Salazar - Enfermera Maru Coronado - Enfermera Clara Marcos - Enfermera Luciana Marrero - Enfermera Andrea Ávila - Enfermera Carolina Cari - Enfermera Ruth Flores - Enfermera Valeria Chilemi - Enfermera Lorena Picorel - Enfermera Agradecemos a nuestro agente de propaganda médica, Adrián Scabuzzo, por habernos acercado al Servicio. Los artículos aquí publicados están destinados exclusivamente a profesionales de la salud y tienen solo un fin informativo. Los textos referidos a nuestros productos de venta bajo prescripción médica se corresponden a los lineamientos aprobados por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT). Laboratorios Andrómaco recomienda acudir a un profesional de la salud calificado ante cualquier inquietud médica. Servicio de Atención al Profesional: 0-800-333-0033 - info@andromaco.com.ar