Gente en acción ADN Andrómaco: Con motivo de los 90 años de Laboratorios Andrómaco Reproducir nota Laboratorios Andrómaco es una empresa de capitales nacionales que elabora sus productos íntegramente en el país. Sólido en el barrio de San Telmo, se encuentra el edificio que cobija a Laboratorios Andrómaco, una empresa con 90 años de ininterrumpido trabajo en la industria farmacéutica. Logro del compromiso conjunto de accionistas y colaboradores que sostienen una trayectoria guiada por el respeto al consumidor y a la comunidad médica. Un hito para una empresa nacional no solo por el camino recorrido, sino por las generaciones que se suceden y siguen eligiendo los productos de la compañía. Emprender, según la Real Academia Española, significa “acometer y comenzar una obra, un negocio, un empeño, especialmente si encierran dificultad”. Y eso fue lo que decidió realizar una familia con ascendencia española en Argentina hace casi un siglo. Es interesante remontarse a 1926, cuando Eduardo Astoul, impulsado por su sobrino catalán, Raúl Roviralta, fundador de Laboratorios Andrómaco en España, desembarcó en el Puerto de Buenos Aires con productos y la misión de abrir una filial en Argentina. Un año después, en 1927, Astoul inauguró la planta en el Barrio de Boedo. Raúl Roviralta, que viajó desde su país natal para presenciar el evento, documentó en su diario el comienzo de la actividad de la siguiente manera: “Instalamos el Laboratorio en la Calle Pasco 66. Gastamos 40.000 pesetas (entonces la peseta estaba con el dólar a 6). Hicimos la primera elaboración de Glefina el día 10 de agosto, vendiendo en el primer mes unos 1000 frascos a 3 pesos 30 centavos (el peso valía 2,5 pesetas)”. Tal era el espíritu emprendedor de los fundadores y su equipo de colaboradores, que en 1941, catorce años después de su apertura y luego de pasar por una planta en la calle Carlos Calvo al 3000, mudaron las instalaciones al representativo edificio de San Telmo en el que se encuentra aún hoy. Diseñado por un arquitecto americano para ser utilizado como imprenta, su planta tuvo el planteo ideal para instalarse y planificar ampliaciones a largo plazo. Las necesidades crecientes de espacio fueron compensadas más adelante por la adquisición de edificios linderos que hicieron posible la expansión necesaria para desarrollar el vademécum reconocido por las familias argentinas. Desde este lugar se elaboran, los productos que forman parte del ADN de la compañía. LA COMPLEJA TAREA DE ELABORAR BUENOS PRODUCTOS A LO LARGO DE TANTAS GENERACIONES “Por elemental que parezca la comparación, una planta farmacéutica es una cocina de escala industrial: ingredientes, agua, vapor, reactores y expertos que velan para que no se produzcan desvíos”, detalla un integrante de la familia fundadora. La elaboración de un producto consta de varios procesos que necesitan ser planificados por distintas áreas de la empresa. A lo largo de los años, claramente los mismos han ido cambiando. De la mano de la modernización propia del correr del tiempo las nuevas regulaciones de calidad, las ampliaciones de la planta, la adquisición de equipamiento, nuevas formulaciones y un valioso grupo de colaboradores se fue cimentando el camino por el que transita la compañía hoy. “Para explicar uno de los motivos que gratamente nos ubica como referentes en la industria farmacéutica, vale remontarnos a comienzos de este siglo, cuando la empresa estaba por cumplir su 75 aniversario y decidimos encarar un nuevo reto estratégico: ser líderes en terapia y cuidado de la piel,” afirma Gustavo Pittaluga, Gerente de Investigación, Desarrollo e Innovación. “Si bien la compañía ya contaba con muchos años en el mercado, el desafío contemplaba no sólo el abordaje de una renovada cartera de productos, sino también el cómo llevar adelante internamente ese cambio”. “El camino elegido nos llevó a implementar una modalidad de trabajo que incluyen prácticas de excelencia en la gestión de procedimientos, de procesos, de proyectos y de innovación”, sostiene Pittaluga. Para asegurar productos confiables, de calidad y respetados por la comunidad médica y los consumidores, a mediados de 2001 se puso en funcionamiento un Sistema Integral de Gestión de la Calidad que le dio forma al desafío propuesto. En sus lineamientos se encuentran: Promover el cuidado y el crecimiento humano y profesional de los colaboradores. Establecer relaciones perdurables con nuestros proveedores. Generar productos que permitan el desarrollo sustentable de la organización. Actuar responsablemente con la comunidad y el medio ambiente. Con esta visión, en 2012 se incorpora a la organización un Centro de Evaluaciones Dérmicas que permite examinar a través de metodologías y equipamiento de avanzada la eficacia, la seguridad y la calidad de los productos elaborados. En 2012 se incorpora a la organización un Centro de Evaluaciones Dérmicas. Con instalaciones de primer nivel, personal altamente calificado y teconología de última generación, realiza mediciones sobre la piel para evaluar la eficacia de productos cosméticos en su etapa final de desarrollo. Siguiendo las regulaciones del Mercosur, lleva adelante determinaciones de factor de protección solar (FPS) y resistencia al agua, bajo estricto control médico. A través de ensayos científicos, analíticos y sensoriales obtiene información valiosa para establecer altos estándares de calidad en la industria cosmética. ESCUCHAR, LEER E INVESTIGAR PARA CONOCER LA NECESIDAD DE LA COMUNIDAD “Como en toda relación, nos gusta partir de la escucha que nos permite identificar la necesidad de la persona. Esto se logra a través de la comunicación, la lectura y la investigación. Es por eso que en el Laboratorio estamos abiertos al diálogo y preguntamos permanentemente a la comunidad médica y a los consumidores qué necesitan, cómo se sienten y con qué sueñan. Sus experiencias nos sirven de inspiración para la creación de productos específicos y pensados según la necesidad. Para lograrlo utilizamos todos los canales de comunicación y las herramientas que disponemos en esta era digital”, afirma Natalia Mazzoni, Gerente de Marketing. A los tradicionales focus groups, mediante los cuales una reducida cantidad de personas habla sobre temas determinados, en la actualidad, se suman investigaciones de mercado online, que permiten abarcar un público mucho mayor. Por supuesto, también se documentan las sugerencias de la comunidad médica, y se presta atención a lo que la gente comparte en las redes sociales y a lo que transmite a través del Centro de Atención al Consumidor en los e-mails, los llamados telefónicos y los canales interactivos. La era digital admite una comunicación abierta y ágil. EL CUIDADOSO MANEJO DEL TIEMPO El lanzamiento de un producto consta de dos grandes hitos que determinan el tiempo que demora una idea en tomar forma y llegar a su comercialización. El primero implica el desarrollo del mismo. “Es necesario destacar que Laboratorios Andrómaco es una empresa de capitales nacionales que elabora sus productos íntegramente en el país. En la industria hay muchas corporaciones internacionales que traen el desarrollo de afuera, algunos incluso, importan los productos listos para la venta. Aclarando esto, partimos de la detección de la necesidad que se plasma en una formulación específica que dispara una cantidad de procesos que no solo cumplen con las regulaciones sanitarias, sino también con el alto nivel de exigencia que persigue la empresa. Este período puede durar, según la complejidad del desarrollo, de dos a cinco años”, comparte. El segundo hito es cómo se comunica el producto. Para ello, el laboratorio confía en el trabajo de agencias de publicidad y de medios que ayudan a elaborar el mensaje de la campaña de lanzamiento. “Un plan de comunicación tarda entre seis y nueve meses. Es una etapa que demanda inversión, planificación y el involucramiento de muchas áreas. Toda campaña de marketing tiene que destacar lo que resulta relevante del producto tanto para el médico como para el consumidor, cumplir con la promesa y presentarlo de una manera atractiva que lo distinga de lo que ya existe”, concluye Mazzoni. LA FUERZA DE NUESTRAS MARCAS Nuestro compromiso con la calidad nos ha llevado a ser las primeras marcas elegidas por médicos y consumidores: DERMAGLÓS: PRINCIPALES LOGROS Marca líder en valores en el cuidado de la piel. (Estimación interna: CID + AC Nielsen, 2015). Ganadora del Primer Puesto a la marca de belleza personal más valorada por los argentinos. (Fuente: Ieco, 2011). Ganadora del Tercer Puesto a la marca más significativa de la Argentina. (Fuente: Havas Media Group, 2015). Marca más recomendada por los médicos para el cuidado de la piel. (Fuente: Close up, 2015). Ganadora del premio Marca más Confiable, por 9no año consecutivo. Premio Revista Selecciones a la marca con mayor prestigio y credibilidad en la categoría solar. HECHOS QUE AVALAN UNA TRAYECTORIA 20,6 millones de unidades vendidas en Argentina. Sólido liderazgo de un 28 % del mercado de productos para la piel en Argentina. 7500 m2 de planta y oficinas en BA. 6500 m2 en un centro de distribución y depósito en BA World Class Equipos especializados de última tecnología en la producción y acondicionamiento de semisólidos. 590 colaboradores. DETRÁS DE UNA BUENA EMPRESA HAY SIEMPRE BUENA GENTE Martín Sánchez Maurello, Gerente de Recursos Humanos del Laboratorio, explica que pensar en la cultura organizacional de Laboratorios Andrómaco lleva a observar algunos rasgos que lo distingue como comunidad de trabajo y que trascienden las puertas de la empresa. La calidez tan particular que se percibe en el colaborador, tanto internamente como en los ámbitos médicos es poco frecuente y muy apreciada. “Cuando afirmamos que Andrómaco es una empresa familiar, no sólo hacemos referencia a la familia accionista, sino también al sentido de pertenencia que generan nuestros vínculos cotidianos. Vínculos edificados sobre los valores que compartimos y están basados fundamentalmente en el respeto por el otro, más allá del rol que ocupe en la organización, ya sea un colaborador, accionista, proveedor, cliente o vecino. Si bien la palabra respeto admite múltiples interpretaciones, nosotros lo resumimos en una: considerar al otro. Un Otro con ilusiones y temores, con alegrías y pesares, con logros y fracasos en sus espaldas. En fin, personas que como tales merecen ser tratadas con la dignidad y cuidado adecuada. Y ese es el corazón de nuestra cultura”. UNA RELACIÓN CON BUENAS BASES “Para nosotros, es muy importante establecer una relación cercana de largo plazo con la comunidad médica y con nuestros consumidores. Para lograrlo, nos enfocamos en generar buenas bases. Una buena base está dada por la elaboración de un buen producto, de calidad, que cumple con la expectativa que se da conocer de manera clara y honesta. Para el Laboratorio es una responsabilidad brindar conocimiento y generar avales que muestren la coherencia mantenida a lo largo de tantos años de trabajo que arroja como resultado la confianza del mercado”. Natalia Mazzoni. EL COMPROMISO DE UN LABORATORIO QUE CUMPLE 90 AÑOS “Parte de lo que nos ha permitido llegar a este aniversario es haber cumplido con el contrato implícito que sostiene que lo que el consumidor adquiere o el médico recomienda es efectivo. Puedo afirmar que generalmente es mucho más efectivo de lo que nosotros decimos. Nos motiva la satisfacción del consumidor y la confianza de la comunidad médica. Sin ellos, nuestra empresa no sería posible,” concluye Natalia Mazzoni. LA LIBERTAD ESENCIAL PARA EL DESARROLLO HUMANO “Así como toda buena semilla necesita buena tierra para ser productiva, no hay mejor terreno para el desarrollo humano y profesional que la libertad. Y es así como se complementa la configuración de nuestro cuadro ideal: ser libres para hacer, crear, desafiar y conquistar lo que buscamos para esta compañía. Donde, teñidos de buena fe, sin especular con los roles prestablecidos, ampliamos nuestro ámbito de responsabilidad al máximo posible, aunque no sea lo más cómodo ni fácil. Este es nuestro motor y lo que explica que más allá de las turbulencias a lo largo de tantos años, sigamos avanzando seguros de que siempre mañana vamos a ser mejores que hoy.” Martín Sánchez Maurello, Gerente de Recursos Humanos. Con motivo de los 90 años La celebración del 90° Aniversario de Laboratorios Andrómaco en Argentina, nos ubica entre las empresas con más larga trayectoria en el país, y simboliza el compromiso que hemos asumido desde nuestro inicio. Allá por 1926, la primera generación familiar iniciaba el proyecto comercializando Glefina, el famoso tónico reconstituyente con "aceite de hígado de bacalao". Su notable éxito provocó la inmediata expansión de las operaciones, hasta alcanzar niveles industriales sin perder el reconocible sello familiar. La empresa ha mantenido también su esencia nacional a lo largo de toda su existencia. Esto es sin dudas el resultado de creer firmemente en lo que hacemos. Durante 9 décadas hemos impulsado un crecimiento continuo, logrando incorporar y arraigar en las familias argentinas productos como Dermaglós, Hipoglós, Macril y Mebutar, entre otros. Marcas cuya sola mención proporcionan tranquilidad y confianza. Este logro solo es posible cuando se trabaja en forma integrada, con pasión y profesionalismo. Este resultado es fruto de toda una compañía, de la comunidad médica que valora lo que hacemos y los consumidores que nos apoyan. Editorial Conexión; Una identidad que cumple 90 años Revista Conexión Andrómaco N°31; 10-17; (2016) Los artículos aquí publicados están destinados exclusivamente a profesionales de la salud y tienen solo un fin informativo. Los textos referidos a nuestros productos de venta bajo prescripción médica se corresponden a los lineamientos aprobados por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT). Laboratorios Andrómaco recomienda acudir a un profesional de la salud calificado ante cualquier inquietud médica. Servicio de Atención al Profesional: 0-800-333-0033 - info@andromaco.com.ar